Los cuadernos de Pío | Su regreso y el reencuentro con su ciudad: Buenos Aires
Resumo
Los archivos son necesarios en la sociedad porque promueven el conocimiento, custodian y preservan nuestra memoria. Cada archivo tiene un carácter único, que deja constancia de las actividades culturales y administrativas, siendo un fiel reflejo de la evolución de las sociedades. Los archivos custodian decisiones, actuaciones y memoria. Nos permiten contextualizar el objeto de estudio y así realizar un análisis más completo. La colección “Los cuadernos de Pío” se propone presentar al lector documentos del archivo personal de Pío Collivadino en fascículos que abordaran diversas temáticas relacionadas con la vida y obra del pintor. El artista tomó la decisión de llevar adelante en forma sistemática y selectiva esta recopilación de material documental demostrando una intencionalidad de dejar registrado todos aquellos sucesos que formaron parte de su vida pública y privada. El material recopilado y organizado es muy valioso en cuanto cantidad y variedad de documentos: fotografías, correspondencia epistolar, bocetos, diplomas, afiches, catálogos y otros. A través de su estudio se puede hacer un seguimiento de la evolución del artista pero también nos permite ver al ser humano, sus deseos, sus pensamientos, sus emociones, sus pasiones y su mirada particular en relación con su entorno y con sus contemporáneos. Marcando claramente el rumbo que tomó su carrera, con aciertos y sinsabores, la de convertirse en figura pública y por lo tanto amada por muchos y cuestionada por otros. Es de gran interés ver plasmada la vida de este artista polifacético desde sus inicios hasta su consagración, no solo desde un punto de vista profesional sino también personal.
En este cuaderno “Su regreso y el reencuentro con su ciudad: Buenos Aires” presenta una serie de documentos pertenecientes al archivo personal de Pío Collivadino que dan cuenta de su extensa y polifacética labor desde que regresó al país en 1906 hasta su fallecimiento en 1945.
En los últimos años de su vida fue homenajeado tanto por colegas como amigos y alumnos. El siglo XXI supo reconocer y revindicar su tan extensa labor y su valioso
aporte a la Historia del Arte Argentino.